Los Minnesota Timberwolves iniciaron su camino en los playoffs con una contundente victoria por 117-95 sobre Los Angeles Lakers en el primer partido de su serie de primera ronda
Liderados por un estelar Jaden McDaniels con 25 puntos y un deslumbrante Naz Reid que aportó 23 puntos y acertó seis triples, los Wolves dejaron claro que su cohesión superaron el emocionante pero insuficiente debut de Luka Doncic con los Lakers, quien sumó 37 puntos en su presentación en la postemporada con el equipo angelino.
El encuentro comenzó con un ambiente eléctrico en un repleto Staples Center, con Doncic marcando el ritmo temprano al anotar 16 puntos en el primer cuarto para deleite del público local. Sin embargo, los Timberwolves respondieron con un segundo cuarto demoledor, marcando un parcial de 38-20 que no solo les dio el control del partido, sino que también expuso las debilidades defensivas de los Lakers. Minnesota, con un despliegue de triples que culminó en un récord de franquicia de 21 aciertos en 42 intentos, mantuvo a los locales al borde durante la segunda mitad.
Anthony Edwards volvió a ser un pilar fundamental para Minnesota, registrando 22 puntos, 9 asistencias y 8 rebotes, mientras Julius Randle y él se combinaron para encestar ocho triples. La precisión en el tiro y la experiencia colectiva de los Timberwolves resultaron abrumadoras para unos Lakers que aún buscan consolidar su química tras la incorporación de Doncic hace apenas dos meses.
LeBron James, participando en su 18ª postemporada, anotó 19 puntos pero no pudo encontrar el apoyo necesario para superar la actuación coral de Minnesota. Si bien Doncic brilló individualmente, Los Angeles no logró sostener la intensidad durante los 48 minutos. La falta de ajuste defensivo permitió a los Timberwolves lanzar sin oposición en numerosas ocasiones, convirtiendo los ataques de Minnesota en un recital desde el perímetro.
La entrada de Naz Reid fue crucial, no solo por su puntería, sino también por liderar la carga que amplió la ventaja de los Timberwolves a 26 puntos en el tercer cuarto. Aunque los Lakers recortaron la diferencia a 12 puntos en el último periodo gracias a una ofensiva frenética liderada por Doncic, los esfuerzos fueron en vano. Minnesota cerró con tranquilidad el juego, demostrando la profundidad de su plantilla y su confianza tras haber ganado 18 de sus últimos 22 encuentros.
Para los Timberwolves, este triunfo no solo establece el tono de la serie, sino que también refuerza su objetivo de superar el éxito alcanzado la temporada pasada, cuando llegaron a las finales de conferencia. Por otro lado, los Lakers, pese a su ventaja de localía, deberán hacer ajustes significativos si desean igualar la serie en el segundo juego, programado para el martes por la noche en Los Ángeles.
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