El equipo lituano remontó una desventaja de 27 puntos en el tercer cuarto para lograr su segunda victoria en Italia en tres días
Zalgiris Kaunas protagonizó una magnífica remontada para ganar 82-85 en la cancha de EA7 Emporio Armani Milan en la cuarta jornada de la Euroliga, completando una semana perfecta en Italia tras vencer a Virtus Segafredo Bologna 68-71 el martes.
El equipo lituano remontó una desventaja de 64-37 a mitad del tercer cuarto, produciendo la segunda mayor remontada en la historia de la competición. Dovydas Giedraitis fue el máximo anotador del partido con 21 puntos, seguido de Sylvain Francisco, quien sumó 17 puntos y 6 asistencias en una gran actuación individual.
Deividas Sirvydis añadió 11 puntos para los visitantes, que han conseguido seis victorias consecutivas contra equipos italianos, consolidando a Virtus y Milan como terrenos fértiles para Zalgiris. Por otro lado, Nikola Mirotic lideró a Milan con 17 puntos y 11 rebotes, Shavon Shields contribuyó con 14 puntos y Zach LeDay sumó 13 para el equipo local.
Zalgiris tomó una ventaja inicial de 4-7, pero Milan reaccionó rápidamente, cerrando el primer cuarto 24-17, con LeDay y Shields controlando el juego para los anfitriones.
La ventaja se amplió a 34-19 tras seis puntos rápidos de Armoni Brooks, incluyendo una espectacular volcada y una jugada de cuatro puntos al anotar un triple con falta. Milan lideraba 49-31 al descanso, y parecía no haber retorno para Zalgiris cuando el equipo italiano se adelantó 64-37 a mitad del tercer cuarto, con Mirotic en llamas desde todos los ángulos. Sin embargo, los visitantes encontraron impulso con una racha de 9-0 y redujeron la diferencia a 66-48 al final del tercer cuarto, sintiendo que aún había oportunidades para una remontada histórica.
Animados por un numeroso contingente de aficionados lituanos, Zalgiris se acercó 71-60, pero Milan parecía tener el control después de que Shields encestara dos tiros claves, un rebote ofensivo y un tiro de media distancia. Sin embargo, Zalgiris implementó una presión a media cancha que desestabilizó a los locales y produjo una racha de 3-16, dando la vuelta al partido para ponerse 78-81.
El final frenético incluyó un gran tapón de Alen Smailagic sobre Neno Dimitrijevic, con los jugadores y aficionados de Zalgiris celebrando efusivamente después de que Giedraitis encestara dos tiros libres antes de que Brooks fallara el triple que podría haber forzado la prórroga.
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