El Barça se llevó el clásico. Los azulgranas vencieron al Real Madrid por 97 a 82 en una gran actuación coral del equipo. Con esta victoria, los de Saras se sitúan líderes de la Liga (empatados con el Baskonia), con un balance de 22 triunfos y 5 derrotas. La nota negativa es el caro peaje que puede haber pagado el conjunto culé, ya que tres jugadores cayeron lesionados durante el encuentro (Higgins, Vesely y Abrines). Por su parte, el Real Madrid que jugó una buena primera parte, vio cómo en la segunda, era totalmente superado por los blaugranas y queda relegado a la tercera posición
El Barça comenzó con una marcha más en el partido que el Real Madrid. Merced a los triples de Abrines y Mirotic, los culés tomaron las primeras ventajas en el encuentro (10-4 minuto 3).
El Madrid no se puso nervioso. Subió el nivel defensivo, provocando las pérdidas de los de Saras. Con cinco puntos consecutivos de Mario Hezonja, los blancos empataron el partido (15-15 minuto 8).
Los azulgranas habían colapsado. No conseguían anotar y la sangría cada vez era mayor. Tras un triple de Musa, los de Chus Mateo lograron un parcial de 0 a 12. Saras no tuvo más remedio que parar el encuentro, para intentar reactivar a los suyos (15-22 minuto 19). De momento, no lo conseguía y el Madrid marchaba con ventaja al final de este primer cuarto (17-24).
La puesta en escena del Barça en este segundo acto, mejoró ostensiblemente. Kalinic y Sanli anotaban con facilidad y el partido se comprimía (28-31 minuto 12). Sin embargo, un sensacional Musa (15 puntos) con grandes acciones de ataque, volvía a agrandar la diferencia blanca (28-35 minuto 15).
Cuando peor pintaba el partido para los blaugranas, la vuelta a cancha de Mirotic (8 puntos) reactivó la ofensiva local. En un abrir y cerrar de ojos, el Barça le dio la vuelta al marcador y se puso por delante (42-40 minuto 18).
En este segundo cuarto se estaba viendo baloncesto de muchos quilates, a la par que duro. A las defensas se les permitía mucho contacto. Llegábamos al descanso con ventaja culé por 47 a 46.
Los azulgranas perdían para la segunda parte a Jan Vesely por molestias en su rodilla izquierda y a Cory Higgins por dolor agudo en la zona lumbar. Bajas muy sensibles para lo que quedaba de partido.
El Barça salió con mejores sensaciones de los vestuarios. Dos triples de Abrines y Sanli, le daban la máxima diferencia del partido (59-50 minuto 24) y Chus Mateo no tenía más remedio que pedir tiempo muerto.
El Real Madrid no había salido tras el descanso. Laprovittola (11 puntos) y Mirotic (15 puntos), estaban sacando el tarro de las esencias y agrandaron aún más la ventaja local. El Palau enloquecía con un mate de James Nnaji (74-59 minuto 28).
El parcial de los de Saras en este cuarto había sido demoledor (31-17). Quedaban diez minutos y los blaugranas disponían de un botín muy interesante (78-63 minuto 30).
El Madrid salió dispuesto a revertir la situación. Los blancos salieron en tromba en este último período y tras cuatro puntos seguidos de Yabusele (17 puntos), se metían de lleno en el partido (78-72 minuto 32). Jasikevicius se veía obligado a parar el juego, ya que el parcial en contra era de 0 a 9.
Llegando el ecuador de este último cuarto, caía lesionado el tercer jugador azulgrana. Álex Abrines marchaba a vestuarios ayudado por los médicos, tras no poder apoyar su tobillo izquierdo.
A medida que iban pasando los minutos, el Barça se iba asentando en el juego. Laprovittola (14 puntos) dirigía las operaciones azulgranas y el Madrid se estaba quedando sin tiempo (89-76 minuto 36).
Hasta aquí llegó la resistencia merengue. Los últimos minutos fueron de disfrute para la afición local, que vieron cómo su equipo se llevaba el partido por 97 a 82.
Redactor · Opinión · NBA · Liga Femenina
Twitter: @jmsantiago33
