Primera derrota del curso en el Gran Canaria Arena (83-90)

Un Real Betis Energía Plus en alza se llevó el triunfo en el Gran Canaria Arena en un final de infarto

No hay partido fácil en esta Liga Endesa. Así lo acreditaban las últimas experiencias amarillas en el Gran Canaria Arena. Movistar Estudiantes y San Pablo Burgos, últimos visitantes del recinto de Siete Palmas, pelearon y llegaron al último cuarto mandando en sus partidos. Real Betis Energía Plus no quería ser menos y, tras dos victorias consecutivas en el torneo -las dos primeras del curso-, buscaba la tercera en la isla.

La salida del equipo de Óscar Quintana fue fulgurante. Alfonso Sánchez levantó el primer tiro del partido en apenas cinco segundos desde más allá de 6,75, acertando de pleno. Fue una muestra del poder ofensivo que exhibió un conjunto hispalense en estado de gracia. Se lo creyó el equipo bético y, jugada a jugada, fueron cimentando una ventaja considerable. Al Herbalife Gran Canaria le costaba carburar en ataque y apenas podía sumar dos canastas de juego en casi cuatro minutos. Pronto se vio once abajo (5-16, minuto 4) y Casimiro solicitó tiempo muerto.

Le vino bien parar un poco al Herbalife Gran Canaria y encontrar su ruta de juego. Aunque fue un proceso gradual. Albert Oliver y Eulis Báez anotaban para recortar distancias, pero el equipo verdiblanco llegó a estirar de nuevo la ventaja. Alcanzó nuevamente los dobles dígitos (12-22, minuto 8) tras una canasta del exNBA Ryan Kelly. Fue entonces cuando los grancanarios aprovecharon el último minuto y medio de cuarto para recobrar sensaciones y acercarse de la mano de Aguilar, que reaparecía en casa, y Gal Mekel (19-22).

El parcial 7-0 con el que se había cerrado el acto inicial aumentó en el arranque del segundo cuarto con un triple de DJ Seeley que ponía las tablas en el electrónico. Se produjo un intercambio de canastas durante varios minutos que colocaban constantes alternancias en el marcador. El conjunto amarillo aumentó las prestaciones defensivas para obtener un parcial de 6-0 con la segunda unidad en pista. El equipo claretiano mandaba pero los de Quintana no bajaban los brazos en ningún momento. Los sevillanos, tras el arranque con diez derrotas consecutivas en Liga Endesa, han cambiado la cara y van en serio a por la salvación.

Pese a estar seis abajo, el Real Betis Energía Plus siguió haciendo su trabajo con una defensa seria y encontrando buenas posiciones de tiro en ataque gracias a una ofensiva muy fluida. De esa manera, el equipo bético logró ponerse por delante en el marcador. Surgió Marcus Eriksson con sus primeros puntos de la tarde, y a la hora del descanso ambos equipos mantenían las espadas en todo lo alto con un empate en el luminoso (41-41).

FINAL APRETADO, SALIÓ CRUZ

Parecía que el descanso había venido mejor a la escuadra local que a la visitante. El Herbalife Gran Canaria encontró al fin su acierto exterior. Dio primero Ryan Kelly pero los claretianos cogieron carrerilla con triples de Báez y Oliver, y dos puntos más del base catalán. Los amarillos se escaparon por nueve puntos (52-43, minuto 24) obteniendo así su mayor ventaja en la tarde. Si bien era el peor momento del conjunto hispalense, los de Quintana no desesperaron y siguieron la ruta establecida. Ni tan siquiera un mate tras robo de Rabaseda, que colocaba nueve de diferencia, les alteró.

Nunca logró el equipo amarillo superar la barrera de los dobles dígitos en su ventaja y quizá eso dio alas a un Real Betis Energía Plus muy voluntarioso y con una madurez encomiable. La calidad de hombres de enorme prestigio como Blake Schlib o Ryan Kelly valió para que el equipo visitante se reenganchara al partido. Un parcial de 1-7 volvió a apretar el marcador y, con los béticos a solo un punto, Casimiro se vio obligado a parar el choque. Las manos de Gal Mekel y DJ Seeley guiaron al equipo ofensivamente en los últimos instantes de cuarto, pero no había manera de abrir brecha ante el correoso equipo andaluz (67-65).

Oriol Paulí sumó los primeros puntos del cuarto desde la línea de 4,60, pero la réplica valió tres de la mano de Luke Nelson, jugador cedido por el equipo amarillo este pasado verano tras hacerse con sus servicios. Los amarillos conseguían poner cuatro de diferencia pero el Real Betis Energía Plus no tardaba en igualar. Tras una fácil canasta de un acertado Mikel Úriz, Casimiro pedía tiempo muerto (75-74, minuto 35) con el partido en un puño y menos de seis minutos por delante.

El Real Betis Energía Plus mantuvo su hambre intacta. Después de dos victorias consecutivas, los de Quintana eran conscientes de que las posibilidades de obtener la tercera estaban intactas. A cada segundo que pasaba, las opciones béticas crecían. Ryan Kelly, clave en los momentos de la verdad, disparaba a los suyos a seis. Albert Oliver anotaba un triple que daba esperanzas a los suyos y luego, tras una buena defensa, DJ Seeley dejaba a los amarillos a solo un punto.

El norteamericano gozó de adicional para igualar, pero su tiro se salió de dentro sin besar la red. En los instantes finales, Ryan Kelly y el Real Betis Energía Plus se mostró más acertado para dar la campanada en el Gran Canaria Arena, donde nadie había ganado hasta el momento.

Nota de prensa Herbalife Gran Canaria

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