Después de un mes de espera debido a cuestiones matemáticas, este martes el Unicaja selló su clasificación a la segunda fase de la Basketball Champions League tras derrotar al Filou Oostende. Este triunfo garantiza su participación en la próxima etapa de la competición, que comenzará a finales de enero con los 16 mejores equipos de la temporada 2024/2025
El Unicaja sigue invicto en una BCL que se le ha quedado pequeña en esta fase inicial. En el arranque de la liguilla, ya derrotó por 7 puntos a Oostende en Bélgica, luego aplastó al King Szczecin por 23, al Aliaga turco por 30 en el Carpena y, después, arrasó en Turquía con una victoria por ¡¡52 puntos!! Este martes, en casa, cerró la fase con un +16 frente al Oostende. Un dominio absoluto que demuestra la superioridad del actual campeón continental en este primer tramo de la competición.
La victoria tiene varios premios: el billete al Round of 16, un récord histórico de 14 victorias consecutivas en esta competición y, además, la “vacaciones intersemanales” ganadas, evitando la eliminatoria de play-in que disputarán los segundos y terceros de cada grupo en enero de 2025.
El Carpena vivió una noche tranquila, con una entrada aceptable, aunque lejos de los llenos habituales en los fines de semana de la Liga Endesa. El ambiente fue relajado, y el Unicaja se impuso con comodidad desde el principio. Con un parcial de 28-13 a los 8 minutos, ya se intuyó que la victoria estaba en camino.
El equipo malagueño fue superior en todos los aspectos: dominó el rebote, mostró buenos porcentajes de tiro y corrió con fluidez. El primer cuarto fue un paseo triunfal para los verde y morados, que cerraron los primeros 10 minutos con un contundente 33-21, y ya habían repartido 10 asistencias.
El segundo cuarto comenzó con un leve frenazo del Unicaja, lo que permitió a Oostende acercarse a solo 6 puntos (41-35). Sin embargo, fue solo un espejismo. Ibon Navarro reajustó las piezas y repartió minutos entre todos los jugadores, lo que permitió que el marcador se fuera al descanso con una ventaja aún cómoda de 12 puntos para los malagueños (53-41).
Tras el descanso, el Unicaja retomó la intensidad defensiva y mostró su mejor versión ofensiva. El equipo se escapó a +20 (66-46) a mitad del tercer cuarto. Aunque Oostende aprovechó los tiros libres para reducir la diferencia, el equipo malagueño siempre mantuvo el control. Al entrar en el último cuarto, la ventaja era de 12 puntos (78-66), pero la victoria ya parecía asegurada.
El último cuarto siguió un guion similar al resto del partido. El Unicaja volvió a aumentar su ventaja a 15 puntos (90-75), y esa escapada definitiva dejó claro que la victoria no peligraba. El intercambio de canastas en los últimos minutos solo sirvió para certificar el resultado final: 98-82 a favor de los de Ibon Navarro.
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