El Flamengo se proclama campeón de la Copa Intercontinental (62-75)

El San Pablo Burgos no pudo reeditar el título de la Copa Intercontinental, de la que era vigente campeón, tras ser superado por un Flamengo muy superior durante todo el partido (62-75). No fue la noche de los burgaleses, que dieron demasiadas facilidades en defensa, penalizadas a golpe de triple por los brasileños (14/35), con el veterano de 38 años Olivinha (17 puntos y 3/5 triples) y el MVP Lucas Martínez (15 puntos y 5/10 t3) como principales verdugos

Los burgaleses se encontraban ante una gran oportunidad para revertir su mala tendencia en una temporada aciaga (son colistas de la Liga ACB), pero no tuvieron argumentos suficientes siquiera para tener opciones de triunfo. Demasiado permisivos en defensa, muy erráticos en ataque (6/29 triples), sólo Benite (14) y Rabaseda (8) se salvaron de la mediocridad. Apenas hubo noticias de Eddie (9 puntos con 2/8 tc), Phillip (11 puntos con 4/12 tc) y Gamble (7) y fueron presa fácil para el experimentado Flamengo, que levantó su segunda Intercontinental tras haberla conquistado antes en 2014.

Los brasileños empezaron a ganar desde el salto inicial. Pusieron muy alto el listón de la intensidad, que el Burgos nunca pudo ni supo sobrepasar, y movieron el balón con mucho criterio para poner tierra de por medio con ocho puntos de Olivinha (4-13, min 4). Paco Olmos dio entrada a Renfroe, Gamble y Rabaseda nuscando más agresividad y acierto, pero ni lo uno ni lo otro. Sólo fueron capaces de anotar tres canastas en el primer acto (2/5 t2 y 17/ t3) y el Flamengo abusó de la floja defensa burgalesa (9/16 t2 y 5/7 t3) y ampliaron la renta con triples de Martínez y Balbi ( 9-25, min 9).

Faverani y Olivinha mantuvieron el pulso para los brasileños, aunque el Burgos tuvo un conato de reacción tras un triple de Salash y tres acciones de coraje de Gamble (25-35, min 17). Parecía que los de Olmos, algo más intensos en defensa, eran capaces de meterse en el partido, pero dos triples de Lucas Martínez abortaron ese conato de resurgimiento (29-45, min 20). En ese acto los burgaleses anotaron sólo seis canastas en juego e incurrieron en siete pérdidas. Así, imposible.

El panorama para los burgaleses emporó en la reanudación. Un triple de Santos y dos de Martínez establecieron la máxima renta y parecieron sentenciar (35-54, min 24). Pero el Burgos no hincó la rodilla. Apretó atras y robó balones para aferrarse al partido de la mano de Rabaseda, Eddie, Phillip y Renfroe (46-57, min 29). Fue el último halo de esperanza para el equipo español, que le duró un suspiró porque el Flamengo lo apagó con triples de Balbi y Robinson (49-65, min 30).

El Burgos necesitaba una machada en el último cuarto para intentar reeditar el título, pero no era su noche. A duras penas acortó distancias con un triple de Phillip (56-69, min 34) tras haber fallado los cinco anteriores sin oposición (5/27 en ese momento). Pero los brasileños no perdieron la compostura, ralentizaron el juego, intercambiaron canastas y conquistaron con merecimiento una Copa Intercontinental de la que el Burgos estuvo siempre muy lejos (62-75).

Fuente: marca.com · Foto: FIBA

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