Incapaz de ganar lastrado por las bajas de Huskic y Lundqvist, al Leyma no se le vio cómodo en su visita a Alicante
Aunque se anticipaba un enfrentamiento marcado por el intercambio de golpes, la dinámica inicial fue distinta. El equipo Leyma mostró cierta vacilación en defensa, mientras que el Alicante, algo descontrolado, se volcó en un ataque que no resultó especialmente productivo. A pesar de algunas pérdidas de balón no forzadas por parte del Básquet Coruña en los primeros minutos, reflejadas en un marcador de 7-3, el partido tomó un rumbo diferente.
Siguiendo la tónica de la temporada, el equipo Leyma continuó con su juego característico, transformando lo gris en momentos vibrantes. Consolidaron una ventaja con un parcial de 0-8, a falta de 3.53 minutos para el final del primer cuarto, liderado por la autoridad de Diagne, quien demostró estar recuperado de su lesión de tobillo con un bloqueo a Barro y un mate contundente poco después. Aunque Harris respondió con un triple, las acciones defensivas de Álex Hernández y los rebotes oportunos de Barrueta reforzaron la determinación con la que los naranjas salieron a la cancha.
Con el paso del tiempo, el equipo Leyma logró imponer su ritmo en el partido, ampliando su ventaja a nueve puntos. Mientras tanto, el Alicante intentaba desestabilizar al Leyma cargando de faltas a Jakovics y McDonnell, además de enviar mensajes con jugadas destacadas como el mate de Kostadinov. Sin embargo, hacia la mitad del segundo cuarto, el equipo coruñés se vio obligado a enfrentar dificultades mientras gestionaba las lesiones de algunos jugadores, como Lundqvist, mediante soluciones versátiles. Álex Hernández cambió su papel en el juego, asumiendo un rol más activo en la primera mitad, a diferencia de su presencia habitual en los minutos finales. Mientras tanto, Pablo Hernández respondió al protagonismo que se esperaba de él.
La situación se volvió tensa, con un Alicante que intensificó el duelo y un Leyma que buscaba contenerse. Davison, el segundo máximo anotador de la categoría, volvió a destacar con canastas desde diferentes distancias. A pesar del bloqueo de Kostadinov en la última jugada antes del descanso, el Leyma logró mantenerse por delante en el marcador (33-35), lo que permitió a Epifanio mantener la calma mental.
Tras el descanso, la dinámica se mantuvo similar, con un Alicante creciendo en el juego, especialmente con el aporte de Kostadinov, quien aprovechó cada oportunidad para anotar. El Leyma parecía desorientado, cometiendo errores y faltas no forzadas. El marcador se mantenía bajo (38-38, a la mitad del tercer cuarto) y un parcial de 7-0 colocó al equipo local por delante después de muchos minutos. A pesar de intentar aprovechar los triples, el equipo naranja carecía de criterio y precisión en sus tiros. Aun así, a pesar de los contratiempos y un parcial de 10-0 en contra, el partido seguía abierto (44-38, a falta de 3.47 minutos para el último cuarto).
Las continuas pérdidas de balón obstaculizaban cualquier intento de recuperación del control por parte del Leyma. Por otro lado, el equipo se aferró al partido mediante tiros libres, especialmente tras la expulsión de Antonio Pérez y la falta antideportiva a Barro. El tercer cuarto se hizo interminable, con el marcador empatado a 48 a falta de 1.36 minutos para el final del mismo. Una técnica contra el Leyma volvió a nivelar la situación (52-55).
Con el partido aún por decidir, el último cuarto comenzó con la dinámica naranja habitual, mostrando un juego rápido y efectivo (por parte de Font, Galán y Diagne), logrando una ventaja de +7 que borraba los problemas del cuarto anterior. Sin embargo, la alegría fue efímera. El Leyma se convirtió en su propio peor enemigo, penalizándose con pérdidas y faltas innecesarias, incluyendo una técnica contra Diagne. Así, de una posible ventaja de diez puntos se pasó al empate a 61 a falta de seis minutos. Un 2+1 de Galán alivió la situación, pero poco después cometió su quinta falta personal. En ese momento, Diagne, Font y Barrueta también estaban al borde de la eliminación (como Aris).
El intercambio de jugadas se intensificó, desde los triples de Font y McDonnell hasta la respuesta de Davison después del mate de Kostadinov. Las pérdidas de balón del equipo naranja fueron más frecuentes y a falta de un minuto y medio, el Alicante tomó una ventaja de tres puntos. Epifanio recurrió a su estrategia en el tablero. A pesar del intento de triple de Barrueta, fue el triple de Gundmundsson lo que sentenció el partido.
ALICANTE (84): Davison (24), Gudmundsson (14), Gatell (4), Rodríguez Juan (3), Kostadinov (18) -equipo inicial-, Harris (9), Bercy (3), Balint (0), Ventura (8), Barro (1), Hook (0).
LEYMA (74): Aris Petersen (3), Jakovics (6), Diagne (11), Pablo Hernández (6), Barrueta (6) -equipo inicial-, Font (12), McDonnell (5), Álex Hernández (4), Galán (17) y Burjanadze (4).
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